El veterano músico del reggae y defensor de la legalización de la
marihuana Bunny Wailer describe la reciente decisión del Gobierno de
despenalizar las pequeñas cantidades de marihuana como “demasiado poco y
demasiado tarde”.
Según Wailer, el Rastafari ya se ha hecho el trabajo al rededor del
Gobierno y, por lo tanto, se deben hacer esfuerzos para acelerar el
proceso.
“Porque para mi la ganja siempre ha sido legal. Mi padre era un
distribuidor desde que nací, era el más grande en el oeste de Kingston,
en la década de 1940 y 50, hasta su muerte en los años 90.
Yo me crié en el comercio de marihuana, desde que era hierba para el
burro. Nos puso a toda la familia en la escuela”, dijo Wailer, quien
actualmente se encuentra en Estocolmo, Suecia en una gira europea.
A principios de este mes, el ministro de Justicia Marcos Golding anunció
que el Gabinete aprobó ciertas modificaciones en la ley en relación con
la posesión de marihuana para uso personal.
Con los cambios propuestos, las personas pilladas en posesión de dos onzas de ganja no serán arrestadas, pero serán multadas.
“En mi vida como un Wailer, nunca he estado detenido ni encarcelado,
sólo durante mi carrera como Bunny Wailer me fue denegada la solicitud
de una visa de EE.UU..
Ese asunto se encuentra actualmente ante la oficina del Defensor del
Pueblo, “dijo. Wailer, cuyo nombre de pila es Neville O’Riley
Livingston, único miembro vivo de los famosos Wailing Wailers que
incluía grandes del reggae como Bob Marley y Peter Tosh.
En su entrevista con el diario Jamaica Observer, Wailer expresó su
preocupación porque no hay ni una palabra, en los cambios propuestos de
la ley, que facilite a los rastafaris fumar hierba como sacramento.
“Estoy buscando los detalles relativos a los derechos sacramentales no solo puede limitarse a la despenalización,” dijo.
El ministro de Justicia había señalado que se están realizando
previsiones especiales para que el fumador de ganja rastafari pueda
consumir en lugares designados por su culto religioso.
En abril de este año, Wailer fue uno de los principales arquitectos de
la marcha por la legalización de la marihuana, que tuvo lugar en el Área
Corporativa, de Half-Way-Tree de Trench Town Patio de Cultura.
La manifestación fue parte del movimiento mundial pro cannabis destinado
a traer conciencia sobre la legalización de la marihuana.