Noticias

Compartir en Facebook Compartir en Twiter Compartir en Menéame Compartir en Linkedin Suscribirse a nuestra RSS

Receta de la clásica harina de marihuana

Lo fácil y útil que es hacer la harina de marihuana o harina cannábica. Se consigue de pulverizar las hojas y los cogollos de la planta previamente deshidratados. Así de simple.


Esta harina nos servirá para la elaboración de múltiples recetas entre las cuales también se puede hacer la mantequilla de marihuana y diversos concentrados a base de alcohol o aceites. Es por esto un básico que recomendamos tener siempre en casa.  Os ahorrará mucho tiempo y os hará mas fácil el consumo de marihuana en recetas.


Ingredientes:


  • Marihuana de buena calidad.

Preparación:


  1. La marihuana debe estar muy seca, de lo contrario no se va a pulverizar bien y no podremos completar el proceso. Tiene que estar bien deshidratada, incluso por dentro para poder desmenuzarlo y triturarlo fácilmente.  Nos ayudaremos de un molinillo de harina o de café.  Vamos pasando la marihuana desmenuzada poco a poco, para que se vaya convirtiendo en polvo, cuanto más fino quede, mejor van a quedar tus recetas cannábicas después. Si hiciera falta puedes volver a pasarlo otra vez o las veces que creas conveniente. Recuerda entre mas efecto “polvo” quede, será mucho mejor para usarla en recetas.
  2. Después de tener el polvo, es aconsejable tamizarlo para retirar los posibles restos leñosos mezclados e impurezas que van a estropear nuestra maravillosa receta cuando vayamos a cocinarla.
  3. Luego honearemos el cannabis a 230 º durante 25 min. Sobre una bandeja previamente
    aci%C3%B3n" target="_blank">descarboxilación del cannabis y es para cambiar THCA inactivo a THC activo.

Y ya esta lista para cocinar nuestras recetas preferidas.


La harina de marihuana se debe conservar en un lugar fresco y seco.


 

¡ADVERTENCIA!


La subida y la duración de un colocón varía mucho dependiendo de si se ingiere o se fuma la marihuana. Cuando se fuma, el subidón llega unos cinco o diez minutos después. Cuando se ingiere, puede pasar una hora o más hasta que se note el subidón. Dado que el efecto psicodélico deseado no se percibe inmediatamente, a veces se cae en la trampa de seguir comiendo, hasta acabar en una sobredosis. ¡Y todavía puede ser peor dado que es posible que el colocón dure cinco horas o más! Por eso, aunque tu cuerpo esté acostumbrado a los porros, vigila la cantidad de marihuana que consumes en una comida: más vale no repetir que arrepentirse después. Si no cultivas tus propias plantas, averigua de dónde proviene la hierba y asegúrate de que los cogollos no han sido regados con pesticidas u otros compuestos químicos que puedan ser nocivos.