Pocas personas saben sobre el sistema endocannabinoide y sin embargo es el mayor descubrimiento médico del siglo 20.
¿Cómo es que una planta, el cannabis, puede tratar tantas enfermedades diferentes?
Es una gran pregunta y por suerte hay una gran respuesta basada en la investigación científica.
La mayoría de las personas aún tienen que escuchar y aprender sobre el sistema endocannabinoide, pero a medida que el mundo esta comprendiendo mejor este sistema fundamental de nuestro cuerpo, se desbloquean los secretos del cannabis como medicina al mismo tiempo que se entiende más sobre la salud humana en general.
Aquí en un vistazo rápido sabremos algunos de los hechos y datos sobre el ECS:
2) A principios de 1990 otro descubrimiento sorprendente vio la luz cuando los investigadores encontraron dos compuestos endógenos que se unen al igual que el THC con el ECS. Estos cannabinoides similar al THC, son producidos por nuestro propio cuerpo y
la regulación del humor
-Apetito
-Memoria
-Inflamación
-La percepción del dolor
-El tono muscular y el movimiento
-La extinción de la memoria traumática
-Protección de los nervios y tejido cerebral
-El crecimiento óseo
-La regulación del tumor
-Recompensa en periodo de lactancia del bebé
-Manejo del estrés
-La presión del ojo
-Motilidad gastrointestinal
-Actividad convulsiva
-Y muchos otros
6) Además de los cannabinoides endógenos basados en las plantas, se han hecho intentos para estimular el ECS con
7) A pesar del conocimiento del ECS y su relación con el cannabis, los gobiernos han mantenido severas restricciones en su estudio y acceso legal a esta planta.
8) A las compañías farmacéuticas se les permite, por su parte, intentar descifrar el Sistema endocannabinoide de otras maneras, creando con frecuencia mezclas químicas que a veces tienen resultados ineficaces, duros o incluso fatales.
Por ejemplo, entre 1999 y 2014 el número de recetas de opioides se cuadruplicó. El número de muertes relacionadas con los opioides también
9) La gente ha estado utilizando el cannabis durante más de 10.000 años (sin una sola sobredosis fatal). Los expertos creen que la selección natural ha conservado el sistema endocannabinoide en