Por los impedimentos de las autoridades mexicanas, los tratamientos con marihuana medicinal no pueden ni desarrollarse, ni tratarse en México.
En un caso muy especial, un juez federal dictaminó no impedir que Graciela Elizalde, una niña de 8 años de edad, recibiera un tratamiento medicinal con aceite de cannabis, que se importaría de los Estados Unidos, por lo que la joven podría convertirse en la primera paciente mexicana que podría utilizar legalmente el cannabis, para fines médicos.
La familia después de consultar con expertos gastroenterólogos, genetistas, optometristas y ortopedistas además de intervenirla quirúrgicamente para reducirlo las convulsiones, intento como último recurso utilizar un tratamiento basado en la marihuana y del que varios testimonios de otros padres de niños con los mismos sintomas reportan bondades con su tratamiento, en este caso con aceites o extractos de la planta.
Los padres de Graciela esperan que con el uso terapéutico de la marihuana se pueda merman o reducir los achaques epilépticos de su hija aumentando su calidad de vida.