Los arrestos de cannabis han disminuido significativamente este año en la ciudad de Nueva York, después de la llamada del alcalde Bill de Blasio para que se cumpla la ley y no arrestar ni acusarlos de delito penal aquellos que posean pequeñas cantidades de cannabis.
Hasta finales de octubre, ha habido un poco más de 18.000 arrestos relacionados con el cannabis en la ciudad de Nueva York. Este dato esta por debajo de los más de 29.000 detenciones efectuadas durante el mismo período el año pasado, lo cual es una disminución global de un 40%, según datos de la estatal División de Justicia Criminal.
Bajo las nuevas reglas presentadas por el alcalde de Blasio, se supone que las personas que poseen hasta 25 gramos de marihuana no serán arrestados automáticamente por la policía. Aunque esta política ha tenido claramente un impacto importante con una caída de más del 40% de las detenciones de marihuana después de sólo un año, todavía hay una gran discrepancia en la forma en que se aplica y se hace cumplir la ley.
La lección es que la nueva política para el alcalde de Blasio es un gran paso en la dirección correcta, pero no logra evitar totalmente que se manche el historial de las personas negativamente y de forma permanente por por haber sido arrestadas por posesión de una sustancia que no debe ser ilegal.