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¿Qué beneficios puede ofrecer la marihuana medicinal en la lucha contra el cáncer?

La marihuana medicinal es el uso médico de las plantas de cannabis sativa y cannabis indica. Los pacientes pueden apropiarse de los efectos de la marihuana bebiendo tinturas, comiendo alimentos cocinados con mantequilla de infusión de marihuana, ingiriendo marihuana cruda o fumando la marihuana, ya sea en cigarrillos, cigarros, o por medio de una pipa. Los doctores prescriben la marihuana medicinal para tratar de aliviar efectos negativos del cáncer.


Historia


La Sociedad Americana del Cáncer explica que varias culturas han documentado por miles de años el uso medicinal de la marihuana, aplicándola para tratar afecciones que incluyen: constipación, malaria, falta de concentración, insomnio, beriberi, gota, reumatismo, depresión, dolor muscular y de las articulaciones, tos y tétano. A lo largo de este período, muchas sociedades también han ingerido la marihuana de forma casual por los efectos narcóticos psicológicos y fisiológicos de la droga. La Sociedad Americana del Cáncer explica que debido al predominio de esta aplicación de la marihuana, muchos gobiernos, entre los que se encuentra Estados Unidos, eventualmente prohibieron su cultivo, venta y compra. No obstante, el uso recreativo de la marihuana ha continuado, conduciendo eventualmente a la formulación de preguntas relacionadas a su potencial terapéutico.


Estado actual de la marihuana medicinal


Recientemente, la comunidad científica y médica mundial ha realizado una extensa investigación sobre el potencial médico de la marihuana, dando muchas veces resultados reservados, con sólo unos pocos estudios con conclusiones, tanto positivas como negativas. La Sociedad Americana del Cáncer informa a nivel federal que desde 2010, la Administración de Alimentos y Medicamentos, o FDA (siglas en inglés de Food and Drug Administration), aprobó el uso del químico activo en la marihuana para tratar varias afecciones terminales, entre ellas el cáncer. De acuerdo con el sitio de internet Marihuana Medicinal, los estados que individualmente permiten el cultivo, venta y uso de la marihuana medicinal para el tratamiento de la afecciones sancionadas por la FDA incluyen: Alaska, California, Colorado, el Distrito de Columbia, Hawaii, Maine, Míchigan, Montana, Nevada, Nueva Jersey, Nuevo Mexico, Oregon, Rhode Island, Vermont y Washington.


Función


La Administración de Alimentos y Medicamentos ha aprobado el uso del cannobinoide tetrahidrocannabinol, o THC, para tratar las nauseas y los vómitos en pacientes con cáncer. De acuerdo con el Instituto de Medicina, el THC es un químico compuesto de la marihuana y es generalmente aceptado como el “ingrediente activo” de la misma, dado que provee tanto la “estimulación” por la que muchos fuman marihuana ilegalmente, así como las cualidades terapéuticas por las cuales la FDA aprobó su uso medicinal. Mediante la cita de estudios publicados entre 1975 y 2005, la Sociedad Americana del Cáncer explicó cómo los diferentes exámenes clínicos establecieron que el TCH reducía el dolor, las náuseas, inhibía el vómito y estimulaba el apetito en pacientes con cáncer. Además, el Instituto de Medicina informó que la sensación de euforia y sedación asociadas a la marihuana poseía un valor terapéutico, debido a que resultaba beneficiosa para los pacientes. La Sociedad Americana del Cáncer asegura que mientras algunos investigadores utilizaban marihuana cruda para conducir los estudios, otros utilizaban sustitutos farmacéuticos que contenían ya sea THC o una versión sintética. Tales sustitutos farmacéuticos nunca requerían ser fumados, sino que los pacientes los ingerían en píldoras y aerosoles orales o usaban parches.


Teorías y especulaciones


La marihuana está asociada con especulaciones compendiosas y controversias. Tanto la Sociedad Americana del Cáncer como el Instituto de Medicina afirman que la mayoría de las especulaciones sobre el daño detrás de la legalización de la marihuana para su uso medicinal incluyen problemas de salud a largo plazo asociados con fumar. También existen problemas sociales potenciales, entre ellos el aumento de su uso en menores de edad, como la creencia generalizada de que la marihuana es “segura” cuando en realidad puede ser perjudicial debido a los cancerígenos presentes en el humo. De acuerdo con la Sociedad Americana del Cáncer, otras opciones de medicamentos pueden ofrecer los mismos beneficios sin los riesgos asociados con fumar marihuana Quienes apoyan a la marihuana medicinal argumentan que muchos pacientes terminales, tales como aquellos con cáncer, no tendrán la oportunidad de usarla a largo plazo. Otros simpatizantes dicen que los problemas de salud que resultan de fumar marihuana permanecen sin ser probados, mientras que su eficacia en el alivio de varias afecciones médicas sí ha sido confirmada. Ninguna de las pruebas de la marihuana medicinal incluyen una evaluación de todos los métodos de ingerirla. Existen varias formas de fumar marihuana, entre las que se incluyen: como cigarrillo, como cigarro, con una pipa, con una pipa de agua, con un vaporizador herbal y con una máscara de gas. Algunos eligen fumar marihuana con tabaco, reduciendo efectivamente el consumo promedio de marihuana, pero incrementando los riesgos asociados con el tabaco. Otras formas de ingerir marihuana son: en tinturas a base de lípidos o alcohol, en alimentos, en aerosoles y en parches transdérmicos. Aunque las investigaciones han explorado algunos de estos métodos, todos deben ser tenidos en cuenta para evaluar efectivamente la viabilidad de la marihuana como una opción terapéutica. Otra especulación simpatizante provista por la Sociedad Americana del Cáncer incluye que la marihuana podría poseer cualidades anti bacterianas, controlar convulsiones y dilatar las vías áreas, lo que ayuda a controlar el asma, retarda el crecimiento de tumores y reduce la presión en los ojos en pacientes con glaucoma.


Potencial


El instituto de Medicina afirma que los cannabinoides probablemente regulan el dolor. Además, confirma que los datos científicos muestran el valor potencial de los medicamentos cannabinoides, entre ellos la marihuana, como terapéuticos contra el dolor, las náuseas, y el vómito, así como estimuladores del apetito en pacientes con cáncer. Este también concluye que los diferentes efectos psicológicos, que incluyen euforia, sedación y reducción de la ansiedad, pueden ser muy terapéuticos para los pacientes con cáncer y deben ser sometidos a exámenes clínicos para determinar su valor. De esta forma, el instituto ha confirmado que la marihuana posee varias fuentes con potencial de valor terapéutico para pacientes con cáncer, por lo que recomienda fervientemente que los investigadores le otorguen una evaluación adicional para determinar sus aplicaciones médicas. Fuente